Mariana Enríquez: Cuando hablábamos con los muertos
«Cuando hablábamos con los muertos» es un cuento de la escritora argentina Mariana Enríquez, publicado en 2009 en el libro Los peligros de fumar en la cama. Relata las experiencias de cinco adolescentes que se reúnen en secreto para jugar con una tabla ouija en la habitación de una de ellas. Lo que comienza como un juego lleno de misterio y complicidad juvenil da un giro inesperado cuando las chicas deciden ir más allá e intentar contactar a los espíritus de quienes desaparecieron durante la dictadura. Entre el humo de cigarrillos y supersticiones, las jóvenes se adentran en un territorio donde lo sobrenatural parece hacerse real.
Mariana Enríquez: El chico sucio
«El chico sucio» es un cuento corto de Mariana Enríquez, publicado en el libro Las cosas que perdimos en el fuego (2016). Narra la historia de una mujer que elige vivir en una decadente casa familiar en el barrio de Constitución, en Buenos Aires, un lugar lleno de peligros, marginalidad y abandono. Allí observa a un niño indigente, «el chico sucio», que vive en la calle con su madre, una adicta embarazada. En un ambiente cargado de violencia, pobreza y superstición, Enríquez aborda los temas de la miseria social y la indiferencia, desarrollando una atmósfera oscura y perturbadora.
Mariana Enríquez: Fin de curso
«Fin de curso», cuento de Mariana Enríquez, sigue la historia de Marcela, una estudiante introvertida, retraída y sin amigos, cuya tendencia a autolesionarse despierta una mezcla de fascinación y horror entre sus compañeras. A medida que su conducta se intensifica, la comunidad escolar se ve envuelta en un ambiente de inquietud y desconcierto, mientras intentan comprender la naturaleza de su tormento interno.
Mariana Enríquez: La casa de Adela
«La casa de Adela», es un cuento de Mariana Enríquez publicado en la revista Orsai en 2012. Narra la historia de dos hermanos que viven en un barrio de Buenos Aires y se hacen amigos de Adela, una niña fascinante y misteriosa. Adela es una niña de carácter fuerte que lleva una vida rodeada de mitos, especialmente relacionados con la ausencia de una de sus extremidades. La amistad entre los tres se ve transformada por su creciente obsesión con una casa abandonada en el barrio, un lugar que parece tener una energía extraña y aterradora. La trama se construye sobre la curiosidad y el peligro, mientras la casa va tomando un protagonismo inquietante.
Mariana Enríquez: Mis muertos tristes
En «Mis muertos tristes», relato publicado en 2024 en la colección Un lugar soleado para gente sombría, Mariana Enríquez nos sumerge en un barrio desbordado por la decadencia y el miedo, donde la protagonista, una médica retirada, narra su relación con los fantasmas que empiezan a rondar su hogar y el vecindario. Anclada a su casa por la presencia persistente de su madre fallecida, la protagonista describe con detalle un entorno asediado por la violencia, las tensiones sociales y el deterioro, mientras lidia con los espectros que emergen de esa realidad. En un tono íntimo y sombrío, el cuento explora la convivencia con lo sobrenatural como reflejo de culpas, miedos y responsabilidades no asumidas.
Mariana Enríquez: Pablito clavó un clavito: Una evocación del Petiso Orejudo
«Pablito clavó un clavito: Una evocación del Petiso Orejudo» es un inquietante cuento de Mariana Enríquez, publicado en la colección Las cosas que perdimos en el fuego (2016). La historia se centra en Pablo, un guía de tours macabros en Buenos Aires, que comienza a ver al espectro del Petiso Orejudo, un infame asesino de principios del siglo XX. La aparición sobrenatural del criminal se convierte en un perturbador reflejo de la crisis personal y familiar que vive el protagonista. Enríquez entrelaza el horror histórico con el psicológico, creando una atmósfera densa y aterradora que explora la obsesión, la culpa y la pérdida de la conexión humana.
Mariana Enríquez: Cuando hablábamos con los muertos. Resumen y análisis
En Cuando hablábamos con los muertos, de Mariana Enríquez, cinco adolescentes comienzan a jugar en secreto con una ouija para comunicarse con espíritus. Al principio es un pasatiempo entre amigas, pero la dinámica cambia cuando Julita revela que quiere contactar con sus padres, desaparecidos durante la dictadura. Entonces, el grupo empieza a invocar a muertos relacionados con ese pasado silenciado, con la intención de averiguar el destino de los cuerpos. Se reúnen en casa de Pinocha y las sesiones se vuelven cada vez más intensas. Un espíritu les advierte de que una de ellas «molesta» y, poco después, la Pinocha vive una experiencia perturbadora: su hermano aparece y desaparece de forma inexplicable, lo que le provoca un colapso emocional. Tras ese episodio, el grupo se disuelve sin comprender del todo lo que han experimentado.
Mariana Enríquez: La casa de Adela. Resumen y análisis
En un suburbio de Buenos Aires, Clara recuerda su infancia y la misteriosa desaparición de su amiga Adela. Junto con su hermano Pablo, Clara se hace amiga de Adela, una niña nacida sin un brazo pero llena de confianza. Los tres se obsesionan con una casa abandonada del barrio, que parece tener propiedades sobrenaturales. Decididos a explorarla, entran una noche de verano, descubriendo un interior imposible y perturbador. Adela desaparece dentro de la casa, un evento que marca para siempre las vidas de Clara y Pablo. Años después, Clara sigue atormentada por los recuerdos, mientras la casa permanece como un enigma en el barrio, convertida en objeto de leyendas urbanas.
Mariana Enríquez: La Virgen de la tosquera. Resumen y análisis
La Virgen de la tosquera, cuento de Mariana Enríquez publicado en 2009 dentro de la colección Los peligros de fumar en la cama, narra la historia de un grupo de adolescentes que, durante un verano en Buenos Aires, frecuenta una antigua cantera inundada —una tosquera— para escapar del calor. Allí se enfrentan a la presencia de Silvia, una joven mayor, más experimentada e independiente, que despierta la envidia y el resentimiento de las otras chicas, especialmente porque capta la atención de Diego, el muchacho que todas desean. La tensión crece cuando Silvia y Diego se hacen pareja, lo que provoca frustración y hostilidad entre las adolescentes. Una de ellas, Natalia, obsesionada con Diego, visita la gruta de la tosquera donde se alza una figura religiosa que no es una Virgen, sino una mujer desnuda de yeso, y le pide algo en secreto. Poco después, aparecen unos perros negros, salvajes y enormes, que rodean el lugar y atacan únicamente a Silvia y Diego. Las demás chicas, en silencio, los observan sin intervenir y abandonan el lugar como si nada hubiera ocurrido, dejándolos a su suerte.