Paul Verlaine: Mujer y gata
Ella jugaba con su gatay era maravilloso verla blanca mano y la blanca patarecrearse en la sombra de la tarde. Ocultaba —¡la desalmada!—bajo aquellos mitones de hilo negrosus asesinas uñas de ágata,cortantes y claras como una navaja. La otra también se hacía la azucaraday guardaba su garra acerada,pero el diablo no perdía nada… Y en … Leer más