Margarita García Robayo: Los álamos y el cielo de frente
Los aeropuertos la ponían nerviosa, pero no por las despedidas. No tenía un solo recuerdo de haberse despedido de alguien antes de tomar un avión. Lo que no le gustaba era la espera, la incomodidad de los asientos, el olor penetrante de los baños. Y las personas que viajaban, sobre todo eso. Tampoco era que … Leer más