Robert Bloch: Dulces para esa dulzura
«Dulces para esa dulzura», cuento de Robert Bloch, publicado en 1947, narra la historia de Irma, una niña de ocho años con apariencia angelical e inusual inteligencia. Irma vive en una mansión antigua y lleva una vida solitaria, marcada por la dureza de un padre cruel y ausente. Huérfana de madre al momento de nacer, Irma se ha criado sola con su padre, quien suele golpearla y acusarla de ser una bruja. El hombre es un empresario arruinado, sumido en el alcohol. La única compañía de la niña es un ama de llaves, quien acude a su tío para que intervenga y ayude a Irma, ya que la niña ha comenzado a tener conductas extrañas y teme no sólo por su integridad física, también por su salud mental. El tío, aunque escéptico, un día va a la casa de su hermano, donde tendrá una experiencia reveladora.