Katherine Mansfield: La lección de canto
Desesperada, con una desesperación gélida e hiriente que se le clavaba en el corazón como una navaja traidora, la señorita Meadows, con toga y birrete y portando una pequeña batuta, avanzó rápidamente por los fríos pasillos que conducían a la sala de música. Niñas de todas las edades, sonrosadas a causa del aire fresco, y … Leer más